María Antonieta de Austria

Fue una archiduquesa de Austria y reina de Francia y Navarra. Todo comenzó cuando tenía trece años, su madre buscaba desesperadamente un marido para María, que fue con el mayor de los nietos del rey Luis XV (Luis XVI)

Pero claro, como intuición materna no se quedó tranquila, por lo que quiso casar a una de sus hijas, Isabel, con Luis XV (vamos, que como si fuera su padre). Por supuesto la madre de éstas trata de sellar la alianza Franco-autríaca (ya que tiene poder y dinero). 

Pasan unos años, nuestra María crece, se casa, todo muy feliz, pero…el señor Luis XVI (su marido) resulta que tiene un amante (emosido engañado), e intentan que eso no les afecte (difícil que no le afecte a María). Al tiempo, ella rechaza sus derechos al trono austríaco. Surge un gran problema, sus padres murieron, no tuvo más remedio que ser reina junto a Luis XVI (más bien, el pone cuernos). Sus comportamientos como reyes no fueron muy maduros, a decir verdad, María, tomaba decisiones caprichosas, como sustituir a ministros, organizar fiestas, hacía apuestas…Esto se acabó cuando una campaña de muestra contra ella, culpándola de haber tenido amantes, hasta haber tenido relaciones con mujeres (esto tiene más chismes que el sálvame naranja)

En 1785 hubo un mal entendido con un carísimo collar, claro, como todo el mundo la odiaba le echaron la culpa de un acto que no cometió.

En 1789 obreros y campesinos cogieron armas, se presentaron en el palacio exigiendo que los reyes abandonaran el trono, ellos intentaron detener esta revolución, pero no sirvió de nada. 

Austria y Prusia hicieron una guerra entre Francia, por lo que pidieron la expulsión del rey. Al mes, la población reclamaba la república francesa. Tras la ejecución de Luis XVI, María sufrió crueles interrogatorios y fue separada de sus hijos. Nueve meses después de la muerte de su marido, fue culpada de alta traición y guillotinada.